Archivo de Abril, 2007

Pánfilos versus avispados

Lunes, 30 de Abril, 2007

Otegi, o sea Batasuna, o sea ETA, amenazó al Gobierno, a la Justicia y a la Ley de Partidos, diciéndoles que como se quedasen sin candidaturas de su ilegal agrado para las urnas de mayo, se iba a armar una buena gresca.
Si ahora sigue diciendo lo mismo sería la prueba del nueve que certifica la tesis de Garzón: no hay relación entre unos y otros. Si la amenaza cesa, ustedes mismos.
Lo indignante no es haber llegado a esa conclusión por falta de pruebas, sino escuchar ahora el desánimo de los mandos policiales que han visto reducido su trabajo de años a nueve folios plagados de dudas y vacilaciones, como si no se supiese con absoluta certeza de qué estamos hablando.
Todo para que Batasuna recupere su reconocimiento institucional y se subvencione con fondos del Estado sin renunciar a la utilización de la violencia que los había llevado a esa ilegalización.
Y así una y otra vez, sin que ningún poder se atreva a desautorizar lo que cada día está más cerca de ser un despotismo desilustrado con apariencia de democracia en régimen monárquico parlamentario que contempla envidioso a sus más admirados modelos de Cuba, Venezuela o Irán, donde se hace y deshace sin miramientos al Derecho Natural.
Advierten los clásicos que los poderes sin límites se elevan a tal altura que acaban siendo aplastados por su propio peso. De ahí que Tagore agradeciese su inmensa fortuna por no formar parte de las ruedas del poder, sino ser simplemente una de las criaturas machacadas por ellas.
Se da por hecho que el político conlleva la condición de ambicioso y que uno de sus principales fines es perpetuarse. Esa idea anula y aniquila la que verdaderamente justifica su existencia y que no es otra que el olvidado servicio público.
Reivindicar hoy esas obviedades suena a pánfilo. Lo de Tagore también.

El españolcísimo

Domingo, 29 de Abril, 2007

Las posibilidades de que Bisbal le arrebate a Felipe II el título de Español de la Historia son mucho mayores que las de Teodosio I el Grande, Séneca o Averroes, por citar tres significativas ausencias entre los finalistas de ese concurso con el que Antena 3 se empeña en hacer el Eurovisión de la Historia.
Cabría comenzar por preguntarse qué méritos se valoran para lucir en el entorchado tan grandilocuente reconocimiento. ¿Haber descubierto la mar ignota? ¿Resistir cinco nominaciones en la Academia de OT? ¿Construir El Escorial? O simplemente ¿ser votado por un mogollón de personas, aunque crean que los libros de cabecera tienen que tener forma de almohada? Mucho nos tememos que se trata de esto último y en ese caso, al lado de Bisbal, echamos de menos a Cachuli, a Belén Esteban y al general Serrano, que es muy conocido por la calle.
De los cien finalistas se deduce que ni las eminencias enciclopédicas al estilo de Roque Barcia, ni los exotismos como los de Anita Delgado, la maharaní de Kapurthala, tienen nada que rascar.
En política apréciase la notable paradoja de que todos los aspirantes están vivos, pues aunque Franco, Azaña y otros de tal corte optan al premio, los han colocado en el apartado de Figuras Históricas, con lo cual llevan mucho por delante.
Sea como sea, los comicios van a resultar muy reñidos. Piensen que cuando se trate de dilucidar entre Paquirri y Alfonso X el Sabio, en casa se oirán discusiones de enorme enjundia: “Pero vamos a ver, querido, ¿cómo va a ser igual crear la Escuela de Traductores de Toledo que casarse con la Pantoja…? ¡Sí, hombre, y con Carmina también!”
Hay mucha tela que cortar. Presiento que los espectadores se lo van a pasar fenómeno. Yo no podré participar porque mi favorito ha sido eliminado en las fases previas, y eso que partía con un cuerpo de ventaja. Me refiero a la antaño llamada Bibi Andersen, hogaño Bibiana Fernández, un español que reúne todas las condiciones de paridad exigidas por el Gobierno. Y eso es histórico.

Qué será, será

Sábado, 28 de Abril, 2007

El trabajo por descubrir si ETA/Batasuna está detrás de las siglas con las que ahora se presenta es agotador. De no realizarse con una lupa de 20 aumentos y la minuciosidad de un orfebre, se corre el peligro de ver terroristas donde en realidad está la Asociación de Amigos de los Reservas de la Real Sociedad, que en sesión plenaria ha tomado el acuerdo de dar el salto a la política.
Hay que repasar, una por una, las biografías de los candidatos, leer sus obras completas, contrastar su expediente académico, escudriñar en sus amistades, leer a Otegi entre líneas, revisar los vídeos de sus entrevistas en televisión, comparar sus apellidos con los de anteriores listas de HB que pudieran parecerse _ p.e.: Urruticortarena y Urrutikortarena _, sopesar su grado de rechazo de la violencia, certificar su adhesión a los principios constitucionales que regulan las elecciones, comprobar sus fes de bautismo, establecer el porcentaje de días que acudieron a alguna herriko taberna y mirar en el Supremo si están incursos en algún delito de sangre. Mucho currele.
Así no es de extrañar que el informe único de la Policía y la Guardia Civil puntualmente remitido a Garzón en 48 horas se queje del escaso tiempo disponible para pronunciarse con rotundidad sobre las divergencias que ambos institutos armados habían expresado en sus anteriores escritos, lo cual “implica limitaciones de análisis y contenido”. Es decir que la decisión de Garzón se basa de nuevo en cestas y en ballestas. Hay un hombre de Batasuna encargado de confeccionar las listas dudosas y un documento que avanza esa estrategia, pero falta la puntilla. Falta de tiempo, falta de ganas, falta de lo que sea, pero falta algo.
Cómo será el informe que Gara lo titula “Las FSE concluyen que ANV no es “instrumento” de Batasuna”. Y ABC lo hace con la siguiente frase: “La Policía confirma a Garzón que ANV es parte del plan de Batasuna”. A eso se llama nadar y guardar la ropa.

La bebé furiosa

Viernes, 27 de Abril, 2007

El caso de la niña de Gijón _ una moderna versión de El bebé furioso que escribió Martínez Mediero _, se cuela en todas las conversaciones porque a la madre le ha dado por acudir a los programas vespertinos de charcutería fina para darle a la tarabita y hacerle la competencia a las verduleras/os habituales. Vamos a hacer un esfuerzo y entenderla. Tiene los nervios como si se los hubiesen pasado por el turmix sin anestesia.
El caso es un típico producto de estación, de siglo XXI, queremos decir. Los afectados tratan de paliar sus males esparciéndolos por los platós por ver si la fama y los derechos de imagen lamen las heridas, y ya de no ser aclamados por adornarse con las mayores gracias, buscan el reconocimiento por acumular las mayores desgracias. Da lo mismo que te pegue tu hija, o que tu padre se haya liado con un cartujo. Hoy cualquier salida es buena, menos admitir que el buey solo bien se lame.
Antaño, cuando imperaba el principio de lavar en la intimidad los trapos sucios, las almorranas se sufrían en silencio, pero ha llegado el tiempo en el que compensa hacerles un video y colgarlas de You Tube. A las almorranas, se entiende. Es la ley de la oferta y la demanda. Si pagan por la basura, aquí tengo yo varios contenedores.
Por lo que concierne al caso de Gijón en sí, la información espolvoreada nos conduce a pensar que en esa casa asturiana, desestructurada como un plato de la nouvelle cuisine, no hay quien se libre de merecer ayudas.
La niña, por ser tan fuerte, tan cazurra y tan cencerra; la madre, por su plomiza debilidad y su impudor infinito; el Gobierno asturiano, pillado a contrapié, por su tardanza; los medios, por estar a la que caiga, y una sociedad tancreda y pasmarote que descubre su impotencia y su desorientación hasta para educar a una mocosa. Y no se crean que hablamos de una gota en el océano. Sólo en Asturias están abiertos otros 35 expedientes similares al de la familia gijonesa. Como para andar presumiendo de nada.

El maniqueo que no cesa

Jueves, 26 de Abril, 2007

Los socialguerristas, o sea, los socialistas resistentes al zapaterismo andante, se preguntan cómo es posible que el presidente haga bandera, no ya de sus simpatías pro-palestinas, sino de su antisemitismo. Tan asustados están de lo que propugna que se han visto obligados a rebatirlo con acto y manifiesto, con bombo y con platillo, convencidos como están de que una política moderna, europea y eficaz no puede esgrimir razones objetivas para escorarse de forma tan injusta como sectaria.
Es una contradicción, una más, de quien vive su mandato como si se tratase de aquel viejo concurso en el que debuta Karina, el Sí o no, donde los matices sobraban porque el premio sólo lo ponían en un lado o en el otro.
Cuando ZP habla de política se olvida de los matices y la reduce al maniqueismo de la guerra civil, que se prende precisamente por eso, por apostar que hay un bando de buenos y otro de malos. Como éste ni se entera, le ha dado por recuperar la tontería, como si le dictase la lección un niño de teta, sin experiencia y con mucho egoísmo.
Los palestinos son buenos y los judíos, malos. Bush es un ogro y Ahmadeniyad, una princesa de inmaculada frente. Su abuelo fue un santo varón, y los otros, grandísimos verdugos. ¡Qué murga! ¡Qué hastío! ¡Qué patraña de parvulario!
Vergüenza insoportable debería sentir al ver a sus correligionarios en pleno esfuerzo pedagógico para enseñarle qué es Israel, cuáles son los valores que defiende y cuán grande es el ridículo de sus insufribles payasadas. Defienden éstos, con toda la razón, que las simpatías por la causa israelí no pueden quedar en manos de la derecha, pues equivaldría a un suicido político difícilmente recuperable en años.
Y volvemos a las grandes preguntas. ¿Quién inspira a ZP? ¿A qué intereses somete su gobierno? ¿Qué hemos hecho para merecer tamaña desventura? Este hombre nos deja en los huesos, nos reduce a polvo y calderilla. Sólo Gamoneda, tan frondoso, se siente protegido por su manto cobertor.

Las apariencias engañan

Miércoles, 25 de Abril, 2007

Un candidato en tonos fucsia, con zapatos de charol, esclavina de fina pedrería y sapillos de azabache repujado repele el voto y predispone a comportarse ante él cual haría la protagonista de Novia a la fuga ante el matrimonio.
Por el contrario, aquél que luzca bien trajeado, con su corbata a juego, en tonos discretos de rico paño y un corte impecable de camisa, inspirará confianza y los votos correrán irá hacia su casillero como gatos al pescado.
Eso lo sabemos desde que la televisión difunde muchas imágenes y muy pocas ideas. No es extraño que los partidos modernos _ acaba de hacerlo el PSOE _, hilvanen y distribuyan manualillos inspirados en la antigua biblia de todo conquistador que se precie, el impagable volumen Cómo escribir cartas de amor. Ahora ese prontuario de rancio clasicismo adopta las formas de Elena Francis Montesinos y se lanza en busca del perfecto candidato. Lo hace a base de expeler recomendaciones sobre los ternos, los tonos y las texturas. Las cartas de amor hacían creer a sus destinatarios que el remitente era un Bécquer resucitado y el engaño podía acabar en boda. Hoy puede acabar en concejal, porque además de apariencias, ¿qué cabe exigir a un servidor público?
La honestidad, que antaño fue bien preciado, no aporta mayores ventajas, pues desaparece en cuanto así lo decida el partido. La ética y la moral son valores tan mutables, que más vale no tener ninguno para adaptarse perfectamente a lo que se cueza en cada momento. Preparación, inteligencia, eficacia o conocimiento producen aversión, no vaya a ser que a los candidatos se les escape disparada una cita de Cleóbulo de Lindos y vayamos a tener un disgusto.
El gris es muy aparente, el negro muy sufrido y donde pongas un marrón, sabes que todo se disimula. Cuánta sabiduría en fondos de armarios se destila con breves trazos. ¿Quien duda ya que detrás de todo gran político se encuentra una magnífica corbata?

Cuanto antes

Martes, 24 de Abril, 2007

El mensaje es que estamos amenazados y que la masacre, Dios mediante, será por mayo florido y hermoso, antes de la segunda vuelta francesa, antes de las nuestras, o antes de que nos demos cuenta; pero siempre será antes, porque después no tiene tanta gracia.
También nos dicen que se han tomado toda suerte de precauciones en Ceuta, Melilla y las ciudades andaluzas de la costa, lugares donde los efectos del terror ya están conseguidos antes de que nada ocurra, gracias a lo cual se confirma que efectivamente, todo va a suceder antes.
Lo último que cabe sospechar de Al Qaeda es que contrate un avión de caramelos para lanzarlos sobre los niños españoles a la piñata; eso ya lo sabemos. Una vez descubierta la aguja de marear de Occidente y comprobados los magníficos resultados que se obtienen, tonto sería quien la desperdiciase.
La cuestión radica en dilucidar si se les va a hacer caso siempre, si la retirada de las tropas de Irak fue un episodio puntual, si estamos dispuestos a hacerles frente, o si llegará un día en el que tendremos que sentarnos con ellos en una mesa de negociación, felices y contentos, porque emprendemos un nuevo proceso de paz en el que sólo nos pedirán anexionar cuatro provincias de nada al califato.
Si no lo hubiésemos vivido ya, nada nos haría dudar de que las masacres serían recibidas sin titubeos, pero la experiencia nos advierte de que las graves amenazas del terrorismo islámico de hoy, mañana pueden llamarse simples accidentes al paso alegre de la paz. O si no, que se lo pregunten a los senadores socialistas, que ayer han aprobado sin ningún empacho el título de presos políticos aplicado a los etarras. O lo que es lo mismo, la declaración de que en España se castiga la disidencia política y no la comisión de delitos de sangre.
Si se va a repetir la misma jugada con los yihadistas, más nos vale adelantarnos, preguntarles qué provincias quieren, e invirtarles a pasar con un amable: ¡Al fondo hay sitio, oigan!

Escaso de grandeur

Lunes, 23 de Abril, 2007

A los franceses, cosa rara, les tira mucho Francia. Aún con sus problemas y sus crisis identitarias a cuestas se aprecian a sí mismos como primera medida. Por eso resultó tan chocante que una candidata con posibles de alcanzar la presidencia se hiciese fotos con un político cuyos méritos más visibles están relacionados con la flexibilidad de sus conceptos sobre estado, nación o soberanía. A poco que se les trate se descubre lo mucho que estiman la grandeur, o sea, aquello que les une y les garantiza fortaleza para no dejarse balancear por vientos ajenos.
ZP es la antítesis de la grandeur. Ni respeta la historia, ni da aprecio a la unidad, ni cree en las leyes que le han llevado a ocupar tan altas responsabilidades. Se ignora lo que Francia puede percibir de todo esto, pero por poco que sea, el marchamo ZP sólo puede ser visto con buenos ojos por la izquierda menos francesa. Ségonèle no da la imagen ZP; sin embargo lo ha querido a su lado, lo cual nos informa de que conoce muy poco a sus paisanos y no se merece presidirlos. (Si las componendas de la segunda vuelta impiden estas impresiones, me como el artículo y santaspascuas).
Por otra parte, sería la primera vez que ZP acierta a estar en el bando del vencedor, salvo en su propio caso. Y no es que el vencedor _ por ahora Sarkozy _, sea siempre la mejor opción, pero al menos es la que mejor conecta con la mayoría.
Javier Valenzuela, su asesor de Información Internacional en la primera mitad de la legislatura, recuerda ahora lo mucho que confía en su baraka, lo mucho que improvisa y lo poco que medita, estudia y planifica. Y todo ello dicho por un rendido admirador. Qué no se dirá de él cuando el tiempo nos permita un análisis profundo y sin miedo a ser acusados de partidismo.
Ségolène se equivocó de modelo y aunque nada sabremos de sus resultados en el caso de no fotografiarse con él, hay tan escasa grandeur en el presidente del sur, que arriesgamos a aventurarle mejores resultados sin su apoyo.

La bilocación

Domingo, 22 de Abril, 2007

La sentencia de Bilbao contra Aguirre, Ezquerra y Portero simboliza, resume y sintetiza todo lo que les espera a quienes se interpongan al paso de la apisonadora nacionalista. Les machacarán la entrepierna y si se revuelven, les acusarán de desórdenes públicos por exhibirla en lugares inadecuados. ¿Cómo se le ocurre lucir el escroto en un lugar donde llueven patadas? Si a estos jueces les hubiese tocado el caso Caín, condenan a Abel por interrumpir el paso de la quijada.
La maquinaria está perfectamente engrasada para subvertir la naturaleza de los delitos, convirtiendo a Miguel Ángel Blanco _ Foro de Ermua _, en el paradigma de los desórdenes públicos, y a De Juana, en la cúspide del comportamiento patriótico. Y aquí sí que no hay exageración alguna.
Como todo el mundo sabe, el clima político del País Vasco está enrarecido por la presencia de organizaciones como la que preside Aguirre, la de Dignidad y Justicia, o el propio PP, que se han propuesto destruir la armoniosa convivencia con provocaciones intolerables hacia el imparable avance del pensamiento único y con alusiones al respeto y la tolerancia.
La sentencia alcanza todo su esplendor cuando achaca a los acusados la utilización de insultos, amenazas, “e incluso conatos de agresión”; todo lo cual justificó que la masa intentase cocinar una tortilla desestructurada a lo Ferrán Adriá con los huevos de Aguirre, una arriesgada fusión de los fogones tradicionales vascos con la creatividad de El Bulli.
Unos jueces tan celosos de los conatos de agresión, las provocaciones, las amenazas y los insultos en las calles de Bilbao, bien merecen una derrama especial para graduarse la vista en cualquier establecimiento del ramo.
Muy posiblemente el agresor de Aguirre, miembro del PNV, habrá asistido este domingo al homenaje convocado por el gobierno vasco a las víctimas de la violencia. La ilusión de muchos, bilocarse en misa y repicando.

Fenómenos extraños

Sábado, 21 de Abril, 2007

Al más puro estilo de Agatha Christie, las elecciones de mayo se preludian con dos misterios dignos de ser investigados por Hércules Poirot. Nos referimos al Caso de las Papeletas Exactamente Iguales a las del Voto por Correo y al Caso del Programa Político Exactamente Igual al de Ciutadans. Iker Jiménez también ha desplegado su equipo en torno a ellos.
Para meterle el diente al primero, son miles los que nos hemos sumergido en las procelosas aguas del trámite administrativo, procedimiento y requisitos para ejercer el voto por correo y aunque todo ese estudio no nos ha servido para comprender qué se pretendía conseguir con unas instancias tan primorosamente calcadas a las originales, al menos hoy disfrutamos de una exhaustiva información al respecto.
Al PSOE se le ha ocurrido pensar que la operación estaba destinada a dar un pucherazo electoral, despreciando otras posibilidades, como por ejemplo, que alguien del PP coleccione solicitudes del voto por correo, o que las quisieran utilizar como postales turísticas de la ciudad.
El asunto no está nada claro. Si hay fraude, Poirot tendrá que explicarnos cómo se pergeña, y si no lo hay, también.
Conviene recordar que en sus orígenes el pucherazo no era obra de un único partido, sino consecuencia del consenso entre dos para así garantizarse la alternancia en el poder al margen de la voluntad de los votantes. Y éste no parece ser el caso. Más que pucherazo, estaríamos ante un imprentazo.
En cuanto al programa de Ciutadans que aparece calcado de forma sorpresiva en el de López Aguilar para sus aspiraciones canarias, cabe suponer que se trata de un fenómeno de abducción, con ribetes de poltergeits y reminiscencias de la escritura automática preconizada por André Breton. Si se siguen las reglas con rigor, puedes pasar del programa de Cicciolina al de Albert Rivera sin solución de continuidad.
¿Por qué no les aplican el polígrafo y nos enteramos?