Archivo de Agosto, 2018

Tortura acústica

Viernes, 31 de Agosto, 2018

El minarete

A las ocho de la tarde, a las ocho en punto de la tarde la plaza de Vic rompe el silencio y de una boca cavernosa surge la voz del Gran Hermano que recuerda a los míseros mortales su destino en esta vida, la independencia de Cataluña.

Primero vienen los toques de aviso, luego las ocho señales horarias; un breve silencio y un repique de campanas pone prólogo al tono intimidario del locutor, que bien podría ser el de un campo de concentración, despiadado y tétrico. Sigue un nuevo repique y el silencio.

Entiendes que en el ánimo de los sufridos habitantes de Vic quede prendido el horror a manifestar cualquier opinión contraria a la voz que retumba desde lo que antes era su casa común.

A Goebbels le habría encantado. Un método sencillo, barato y machacón que no nos extrañaría ver repetido en otros consistorios catalanes a las ocho, a las nueve o a las diez.

En la iglesia ferrolana de San Salvador de Serantes se produjo un curioso episodio en los años de la República que nos vino a la memoria a raíz de esta monstruosidad de Vic.

Allí, concejales de izquierda logran del concello todo lo contrario, o sea, que las campanas de la iglesia de Serantes prescindan del toque de difuntos, según ellos, por la infinita congoja que tal sonido produce en el ánimo de los parroquianos.

Se entiende que es en el ánimo de los de izquierdas, descreídos en asuntos de la vida eterna, pero afectados ante el ritmo del campanero.

¿Qué dirían los de Serantes si se enteran de que ochenta años después, a las campanas se les añade la voz de ese heraldo conminatorio que expande la congoja aderezada con las consabidas mentiras sobre los presuntos delincuentes y fugados que se disfrazan de presos políticos y exiliados?

A saber, porque a algunos de sus herederos ideológicos les agradan las campanadas con tal de que no le meneen la poltrona.

El BB ya no es lo que era

Jueves, 30 de Agosto, 2018

Desde que se han descubierto evidencias de haber existido un universo anterior al actual, todo ha subido varios grados de mayor relatividad.

Nos informan de que hace un tiempo no había nada igual a lo que hoy conocemos, ni Tierra, ni Sol, ni regiones lejanas sin explorar. Y quien dice un universo anterior también abre la puerta a que sean mil millones de universos anteriores en los que la imaginación, sin gota de ciencia en la que apoyarse, se pierde y desvaría.

Si ya éramos insignificantes cuando todo empezaba en el Big Bang, ahora pasamos a la categoría de brizna galáctica; aunque como dice la cantiga, será brizna, pero es la mía.

A Sánchez le afecta el descubrimiento como al que más. En esa nueva perspectiva, el presidente mengua respecto al día en que toma posesión y habrá un momento en el que no quede de él recuerdo alguno. Tiene que ser terrible en alguien con un ego tan desmesurado descubrir la pequeñez en medio de tantos universos danzantes y sucesivos.

¿Cuántos valles de los caídos habrán existido a lo largo de tantos universos? Da vértigo pensarlo. ¿De qué vale la experiencia si cada X millones de años hay un BB que acaba con todo? Son bonitas reflexiones para la hora de la siesta.

En realidad, todo lo anterior es un pretexto para contarles un chiste de ésos a los que llaman memes y que me llega esta mañana mientras busco temas para la columna. Lo veo, me río y me pregunto: A ver qué invento yo para contarles a los lectores esta tontería sin que suene demasiado frívola.

¡Ah! Ya está. Arranco con el universo anterior, que es un tema muy profundo, y acabo con el chiste, que es una chorrada.

El caso es que se ve a Pedro Sánchez y al lado, bastante más abajo, claro, a Pablo Iglesias. El texto dice: El dúo Sacatumbas. Fin de la cita.

La mosca negra

Miércoles, 29 de Agosto, 2018

Óscar Soriano encarándose a la mosca

Dentro de la fauna con la que nos ha tocado compartir siglo, reconozco cierta inclinación hacia un personaje que ni es en puridad un político, ni se sabe muy bien lo que es.

Nos referimos a la incomparable monja Caram, llegada de allén de los mares hace veintitantos años para ser religiosa contemplativa en España, aunque en determinado momento lo que ella decide contemplar es su nombre escrito en los medios, casi siempre al lado del de golpistas y con harta frecuencia como fuente inagotable de insultos, mal rollo y desprecio hacia la nación que la acoge.

Sangre libanesa y argentina confluyen en Tucumán para dar cuerpo a Lucía, cuya vocación se centra en ayudar a los necesitados, lo cual es digno de los mayores elogios. ¿Pero estamos todos necesitados de ella?

La monja se define como la mosca cojonera de los políticos, pero no es cierto, porque ejerce esa función según y cómo. Por ejemplo, de los que tiene cerca, que son los que generan mayor pobreza e inestabilidad a las personas que atiende, no dice nada más que flores. Sin embargo, cuanta mayor sea la inquina que destilen contra España, más le apasionan.

Su vara de medir está torcida porque le priva el conflicto y cómo crearlo. Este año alcanza uno de sus momentos estelares cuando se le ocurre comparar a Puigdemont con Jesucristo, una idolatría a la que nos tenían acostumbrados los césares romanos, pero desde el último de ellos hasta nuestros días, salvo excepciones, nadie se atrevió a tanto, por lo que bien podríamos decir de sor Lucía que mosca, sí, pero negra, de ésas que traen de cabeza a mi amigo Óscar Soriano porque como es biólogo especialista, le preguntan a diario por ellas.

Las moscas negras muerden, provocan manchas rojizas y alarman, pero no transmiten nada; vamos, como la Caram.

La tristeza como pecado

Martes, 28 de Agosto, 2018

Evagrio tenía razón

Cuando se discute si el que pega a la señora por quitar el dichoso lazo es un matón o un probo ciudadano, es señal de que hemos perdido el norte y de que la ideología ampara el delito, como en las épocas peligrosas.

Cuando se cree que atacar a unos guardias civiles de paisano es un acto digno; cuando se protege a los profesores que acosan a niños por culpa de la profesión de sus padres; cuando se defiende a macarras disfrazados de sindicalistas que agreden a heladeras embarazadas, o a raperos que ensalzan la violencia, es que además, se ha producido una gravísima alteración de la percepción moral y filosófica de la vida, en los niveles establecidos desde Grecia, por no ir más lejos.

Pero si además de todo eso compruebas que tu gobierno, y alguno de los gobiernos instalados en las inmediaciones, no solo comulgan también con ese tipo de alteraciones, sino que pretenden saltarse a la torera el ordenamiento jurídico, las instituciones del Estado y el sentido común; cuando atentan a diario contra los principios de convivencia alcanzados con graves esfuerzos no hace mucho, cuando ves que quieren dejar indefenso al juez que defiende la ley; cuando añaden al órdago sus deseos de ¡asaltar la gramática de la lengua castellana! _ y es de imaginar que la de todas las lenguas oficiales _ y cuando ves que se colocan constantemente del lado de los que tienen por norma dinamitar al Estado, vía secesionismos, vía golpe al sistema democrático; te entra una tristeza infinita, de ésas que Evagrio Póntico incluye como el octavo pecado capital hasta que san Gregorio Magno decide eliminarla de la lista y dejarlos en siete, bajo el pretexto de que el humano tiene derecho a estar triste sin pecar por ello.

Hizo mal el papa del canto gregoriano. Hay que prohibir la tristeza, pero sobre todo, hay que penalizar a quienes la causan.

Gran cosecha de bobos

Lunes, 27 de Agosto, 2018

En todas partes miran a otro lado

Algún día habrá que estudiar en profundidad cómo es posible que se incremente la producción de imbéciles a la velocidad que se registra hoy en España.

Se supone que cada país, por muy adelantado que esté, fabrica al año una cantidad de mentecatos notable. Esto es así porque el ratio de crecimiento no tiene nada que ver con el analfabetismo, ni siquiera con la generalización de los estudios universitarios. Vamos, que no hace falta ser ilustrado para ser listo.

Las aulas ayudan, pero no son definitivas. Hay universitarios muy pánfilos y jóvenes escolarizados cuyo parecido con los homínidos y con las morsas es asombroso.

Quiere esto decir que la producción no se detiene hoy con la educación por varias razones. Una de ellas es que existen poderoso canales que plantean opciones gamberras, como si la ignorancia pudiese ser en algún momento una alternativa al conocimiento.

Esto está expresado con dos puntadas, pero de ahí que comenzásemos pidiendo un estudio en profundidad.

En definitiva es la España del lazo amarillo, un país pacato, sumiso e invertebrado, dirigido por ignaros de infinita soberbia, compinchados con delincuentes y descuideros que no están dispuestos a dejar un euro sin expropiar, porque ni saben ni les preocupa cómo se hace para generarlos, a no ser cogiéndolos de donde existen.

El lazo amarillo es el insulto y el robo. Un símbolo nacido al rebufo de la gran corrupción que encuentra no solo el beneplácito de los que están organizados para el latrocinio de todo lo que haya por delante, sino también de muchos de los que van a ser robados, quizás porque actúan como el Lazarillo y el ciego. Si dejas que me lleve dos, es porque tú te estás llevando tres. Y encima multan a quien arranque un lazo.

¿Hay o no hay superpoblación de tontos?

El Valle de los Reyes

Domingo, 26 de Agosto, 2018

Reverte Coma
Foto: Manuel Marlasca

El año pasado falleció en Madrid José Manuel Reverte Coma, que entre otras singularidades, reúne en su biografía dos actividades que no suelen ir parejas, pues en vida fue antropólogo forense y alcalde de Benidorm.

Las piezas que hoy integran el Museo Universitario de Antropología Forense, Paleopatología y Criminalística de la Escuela de Medicina Legal de la Universidad Complutense _ para decirlo en corto, Museo Reverte Coma _, son espeluznantes y su contemplación no es recomendable para espíritus impresionables.

Uno de los numerosos libros de Reverte se titula La maldición de los faraones, y en él, con todo el espíritu científico que le confiere su condición de catedrático y de discípulo de Gregorio Marañón, estudia lo que en su título se dice, en concreto la que atañe a la tumba de Tutankamón en el Valle de los Reyes.

La ostraca cerámica encontrada en ella, donde se contiene la mencionada maldición, dice, según Reverte, lo siguiente: “La muerte golpeará con su miedo a aquel que turbe el reposo del faraón”.

Sabido es que Lord Carnarvon, financiador del proyecto que va a alterar el estado de reposo de Tutankamón tres mil años después de ser enterrado, muere cinco meses después del descubrimiento y alrededor de Carnarvon se producen varias muertes más que alimentan la creencia en la profecía de la ostraca.

Reverte se especializa en el estudio antropológico de la muerte y gracias a él existe este museo de nombre tan largo. Es una lástima que haya dejado este mundo el año pasado, porque él era, por encima de juristas y políticos, el hombre más indicado para opinar sobre este otro Valle de los Caídos y lo que se pretende hacer con el faraón allí enterrado. Me da por pensar que no opinaría nada bueno de estas manipulaciones.

Mal os veo

Sábado, 25 de Agosto, 2018

Mucho telefonito y pocas pensioncitas

Ya saben que ahora no hay conversación que se precie sin que en algún momento los contertulios tengan que descubrir a qué generación pertenecen, según una taxonomía inventada por alguno de estos institutos modernos que se dedican a poner nombre a las cosas que no lo tienen.

Gracias a ese supuesto organismo, me entero de que pertenezco a la más numerosa que existe hoy en España. Somos los nacidos entre 1949 y 1968 y sumamos más de doce millones de personas. Por eso nos llaman la Baby Boom, años de pocas píldoras anticonceptivas o ninguna. Si nos unimos a la anterior, la Silent Generation, nacidos entre 1930 y 1948, somos dieciocho millones y medio de personas. Un montonazo.

Si usted ha nacido antes del 30, ni generación le dan. Así de simpáticos son estos sociólogos de pacotilla. Pero no se preocupen, los Baby y los Silent estamos dispuestos a hacerles un hueco entre nosotros e incluso a darles un nombre, los Yayos.

Bueno, pues a pesar de ser tantos, aquí lo único que vale ya es ser de la Generación Z, o sea, los imberbes nacidos a partir de 1994. Gente muy joven, lógico, que está marcada por la irreverencia y a la que, por lo visto, le da igual ocho que ochenta. O sea, que si se trata de euros, les da igual quién se los dé, los Baby, los Silent o los Yayos; pero que no parecen muy dispuestos a pegar golpe.

Atrás quedan, obsoletos, la Generación X (1969-80), y los millennials (1981-93). Como todos ellos son los que tienen que procrear para que alguien les pague las pensiones el día de mañana, han de saber que ni los Baby, ni los Silent, ni los Yayos vamos a estar entonces. No por nada, sino sencillamente porque nos toca descansar. De modo que, o se poner mano a la obra, o las van a pasar canutas con su irreverencia a cuestas.

Más vale que lo sepan cuanto antes, criaturas.

Memoria reciente

Viernes, 24 de Agosto, 2018

Antes de que el No a los independentistas fuese Sí

El verano no necesita serpientes para darnos todos los días una buena ración de noticias impactantes. No es ninguna alegría porque muy pocas hablan de entendimiento, mejoras o prosperidad, sino de abusos, odios y resentimientos.

Una nueva palabra se cuela para sustituir al culebrón estival. Es el decretazo y define la forma de encarar la gobernación del presidente Sánchez, para imponer su criterio y para escapar de una minoría parlamentaria que hace imposible aplicarlo con coherencia, pues se ve obligado a ceder ante socios insaciables e inconvenientes, como él sabe desde antes de plantear la moción de censura.

“El continuo recurso al Decreto-ley desvirtúa por sí mismo los fundamentos de la democracia parlamentaria”. El autor de la anterior frase es Pedro Sánchez, tal como ayer lo recordaba Agustín de Grado. Es decir, que el presidente conoce al dedillo la teoría, pero llegado el momento, no la aplica, como en tantas y tantas ocasiones desde que llega a la poltrona de sus anhelos.

Él y su brazo derecho, Ábalos, aquel hombre que parecía destilar el canon de la excelencia política, se han pasado por el forro de los pantalones toda cuanta doctrina utilizaron para presentarse como tiernos corderitos, amantes de España y poseedores del récord de la bandera más grande que jamás se vio.

Menuda desvergüenza y menudo cuajo. El lector todavía tiene que recordar el tono vocal de ambos personajes cuando nos decía, ¡hace cosa de un año! que jamás de los jamases pactarían para gobernar con partidos que no respetasen la Constitución. “Los independentistas no pueden ser aliados nuestros ni en una moción de censura”, dijeron entonces estos dos pajaritos, y de ahí, a la Presidencia y a Fomento. Y de ahí, al decretazo y al concierto de The Killers en Falcon. Es la desventaja de la memoria histórica. Que se acuerda uno de todo.

Franco, más

Jueves, 23 de Agosto, 2018

Villaverde con Barnard, aquello salió mal

Venga, hablemos de Franco, que es la mejor manera de no hablar ni de Cataluña ni de Begoña. Hablemos de Franco hasta la extenuación y digamos que era malo como la tiña, porque si se nos ocurre lo contrario tienen preparada una batería de decretos ley que ríete tú del paquetazo rojo de Maduro.

Primero te mandan a la cárcel y después, a la escuela de verano del PSOE, donde Tezanos te inyecta en vena una encuesta del CIS en donde sale que Sánchez es el presidente más cojonudo que ha existido en cualquier país de la Pachamama, o sea, de la madre tierra.

Sánchez es a Dios lo que Franco a Belcebú. A ver si te enteras, imbécil. Lo quieren sacar del Valle para enterrar a Sánchez en el hueco que deje libre. Cuando se muera, claro; no ahora, que todavía vive y colea.

Lo mejor sería que nos enterraran allí a todos. No hay grandes dificultades técnicas, ni de espacio. El Valle de los Caídos. ¿Quiénes son los Caídos? Los que no se tienen en pie, verbigracia, el personal.

Otero Besteiro quería enterrarse en su mosca-tumba, que era un féretro con forma de díptero. “La mosca es el animal más perfecto que hay”, decía él, a pesar de que era dueño de un mono llamado Manolo. Al final lo vienen a enterrar a O Corgo con sus válvulas de choto americano que le instala en su corazón el marqués de Villaverde.

Ya ves. Tanto renegar de las instituciones y permites que el yerno de Franco te inserte un trozo de ternera. El médico más institucional que entonces te puedes echar a la cara.

¿Por qué no una mosca-tumba para Franco en pago por el choto? Hablemos del tema unos cuantos meses más, a ver si conseguimos que Sánchez llegue entero a las elecciones, sin que suelte jirones de su carne a cada paso que da.

El Caudillo, como siempre, rindiendo favores a la patria.

Franco, todavía

Miércoles, 22 de Agosto, 2018

La historia debe escribirse fuera de los despachos

Tenía que suceder. Tanta memoria histórica, tanta censura, tanto Valle de los Caídos, solo podía propiciar la mayor campaña a favor de Franco que se recuerda desde que ya no está vivo.

Cuando a la mayoría de los españoles nos interesa que Franco sea estudiado a la luz de la ciencia histórica para que nos lo presente ora mejor, ora peor; como a Felipe II o como al conde-duque de Olivares, resulta que una serie de señores con cargo público, pero con un 0 de ciencia a sus espaldas, a los que podemos llamar sencillamente profanos en la materia, se han inventado la purga de Benito para maquillar sus errores pasados con leyes que contradicen desde el principio hasta el final el sentido común, la esencia de la investigación y el valor de la experiencia.

La purga, que no es tan de Benito como de corte stalinista, pretende hacernos creer que la dictadura solo trajo desgracias, y que quienes vivimos bajo ella, o éramos del régimen, o estábamos en la cárcel.

Tanto ha ido el cántaro a la fuente que ahora no hay día en el que no se pongan en circulación docenas de mensajes cuyo principal objetivo es demostrar que Franco, además de dictador, hizo una gestión que para si la quisieran otros gobernantes salidos de las urnas.

Con ello nadie pretende ocultar que el personaje crujió a su antojo a quienes no le facilitaban las cosas, pero ese detalle no le hace distinto de otros muchos que desde el bando republicano torturaron y asesinaron tela marinera, un aspecto que a lo mejor algún lector jovencito desconoce, porque la memoria histórica va calando para destruir a su paso la objetividad ante los hechos consumados.

La manipulación no va a parar. Ha venido para instalarse en nuestras vidas como tantas otras cosas tan parecidas a una dictadura, que es aquel régimen donde solo se permite pensar lo que el mando autorice.