Archivo de Agosto, 2017

Objetivo, un millón

Domingo, 13 de Agosto, 2017

El Día Mundial sin Pantalones es otro distinto

Es el Día Internacional de la Juventud y sus organizadores ponen sobre la mesa una cifra que es como una losa y un agravio. 150 millones de jóvenes no saben leer ni escribir. A los países donde el analfabetismo está más o menos desterrado se nos deberían caer los palos del sombrajo al escuchar esa realidad y comprobar a qué otras campañas e intereses dedicamos grandes esfuerzos a lo largo del año.

Al lado de esa carencia está el hambre, claro. Una angustia que se deja sentir con urgencia diaria, mientras que la existencia ágrafa se lleva aparentemente mejor, aunque solo sea un trampantojo de los sentidos.

Volvamos una vez más al viejo y rotundo aserto: Si queréis que deje de pasar hambre un día, dadle un pez; si queréis que deje de pasar hambre toda la vida, enseñadle a pescar.

Leer y escribir es la pesca total, el primer paso para procurarnos la subsistencia. Por eso resulta inconcebible que los esfuerzos realizados en ese sentido sean tan rácanos, tan extraordinarios, tan puntuales.

Y ahora hay que decir también que la culpa no solo recae en los países preparados para ofrecer la ayuda, sino que también en muchos casos radica en los gobiernos o satrapías que rigen esos territorios, recelosos ante la posibilidad de que un pueblo fácil de manejar con supersticiones y letanías impuestas, comience a pensar por su cuenta y llegue a la conclusión de que está siendo explotado por una pandilla de tiranuelos que jamás darán un paso en pos del beneficio común.

A veces esa misma situación se da incluso en poblaciones no ágrafas mediante la utilización de otros medios más sofisticados, pero todo tiene un orden de prioridades y la que nos propone este año el DIJ es profundamente sugestiva. Ojalá en 2018 nos digan que solo necesitan instrucción 149 millones de jóvenes.

Cosas que no son ciertas

Sábado, 12 de Agosto, 2017

Policías de paisano (foto manipulada)

Ahora resulta que estamos mal informados sobre lo que ocurre en Venezuela, porque aquello es el paraíso terrenal sin serpiente y el Baden-Baden del XIX. Las verdes praderas pobladas de huríes que algunos esperan encontrar si mueren en combate ya están aquí. Basta aterrizar en Maiquetía.

Estamos mal informados. Maduro es a Pericles lo que Chávez a Solón, pero no somos capaces de percibirlo porque hay unos tipos por el medio que se dedican a manipular la información. No toda, solo la que viene de Caracas.

Todo esto lo dice Maite Mola, que no sabemos si es pariente del general, pero sí que es catedrática de Matemáticas, vicepresidenta del Partido de la Izquierda Europea y miembro de la directiva de IU.

La mujer se ha visto en el compromiso de defender al ínclito Maduro y sin más ramas de las que agarrarse, decidió tirar por el camino de la manipulación, que siempre ha dado muy buenos resultados a quienes saben manejarla, pero que en el caso que nos ocupa está en manos del otro.

En su afán por defender lo indefendible, dice Mola que “las noticias son muy sesgadas” y que a veces “se dicen y se hacen cosas que no son ciertas”. Desde el punto de vista científico estamos ante un descubrimiento extraordinario, puesto que hasta ahora no se había logrado “hacer cosas que no son ciertas”.

¿Cómo podríamos explicar este fenómeno? No sé. Por ejemplo, ¿que un niño construya un castillo de arena que no es cierto, porque le sale un oso? ¿Se referirá a eso? No creo, porque en tal caso el niño nunca hace un falso castillo, sino un oso verdadero.

Quizá la señora Mola no ha visto las brutales palizas con las que se despacha la policía chavista para intentar que a los venezolanos les entre en la mollera la idea de que viven en la mayor democracia del orbe. Y ellos, nada; manipulan las heridas y dicen que son caricias.

¿Qué le echan al espetec?

Viernes, 11 de Agosto, 2017

Y es que lo devoran

En nuestro afán por formularnos preguntas claves, pero de difícil solución, como por ejemplo ¿no hay en toda Venezuela alguien más listo que Maduro?, o ¿quién hace el CIS?, llegamos hoy a la que figura en el título.

Sí, porque después de vigilar a Cataluña, con lupa y a diario, durante estos últimos treinta años sin encontrar sentido a la mayoría de las cosas que pasan allí, deducimos sin miedo al riesgo que algo le echan al espetec para que día tras día se produzcan nuevos casos de abotargamiento neuronal.

Descartados otros posibles agentes climatológicos, medioambientales o extraterrestres, apostamos por centrar nuestras sospechas en la secallona, la somalla, el fuet y el espectec, vamos, lo que es la longaniza, y hacerlos responsables de lo que sucede.

Los síntomas más graves del síndrome consisten en atacar todo lo que hasta este momento les proporcionaba las pelas y les hacía ser un pueblo admirado y hasta envidiado. Por ejemplo, su pertenencia a España y a Europa _ palanca única y fundamental para todos sus logros _; por ejemplo, el seny _ que como ustedes saben, es la cordura o sentido común _ y por ejemplo, el turismo, un sector del que dependen 500.000 catalanes y gracias al cual cada año hay en juego en esa comunidad autónoma la bonita cantidad de 50.000 millones de euros.

Pues bien, todo ese filón de seguridad, riqueza y sensatez está siendo atacado por todos y cada uno de sus representantes políticos, o por lo menos, por todos los que se sienten más castizos de aquellas tierras, lo cual es sencillamente demencial.

A falta de estudios más rigurosos que sean capaces de descubrir drojas en el colacao, nuestro diagnóstico provisional es que le echan algo al espetec y luego pasa lo que pasa.

Consumo debería abrir una sesuda investigación al respecto.

No hay dos caminos

Jueves, 10 de Agosto, 2017

El camino está marcado

En realidad a todos nos debería importar un pimiento lo que diga el TC sobre el referéndum, porque ante los artículos 1 y 2 del título preliminar de la Constitución, los proyectos de la Generalidad de Cataluña no solo son ilegales a todas luces, sino también un robo, un golpe de Estado y una asonada.

Otra cosa será comprobar cómo se substancia finalmente el embrollo y el balance de damnificados que deja.

Quienes peor lo tienen son los propios secesionistas, porque si sus ansias infinitas de independencia no se materializan, habrán perdido el tiempo, el crédito y dinero, mucho dinero. Si por un casual tropiezo de la historia, las llevan hasta el puerto, las pérdidas pasadas se quedarán ridículas frente a las que van a sufrir.

El espectáculo que ofrecen a punto de doblar la primera decena de agosto es de pena mora. Ya no saben qué hacer con los cargos inhabilitados, si sustituirlos y liberarse del muerto, o seguir con ellos. Total, si están por desobedecer al TC, frente al delito de sedición tres inhabilitados arriba o abajo no van a ninguna parte.

Pero como por el medio se encuentra la CUP, y no con un papel menor, el pastel se completa con sus ilusiones y su estrategia, que es movilizar a la masa y poner las calles en pie de guerra. ¿Cuál si no? De hacerlo siempre surgirán motivos para la confrontación y en ese caldo es donde mejor chapotean.

El calendario avanza inexorable y todos nos preguntamos qué va a pasar, como diciendo ¿por qué no pasa ya? La parte de la legalidad tiene toda la fuerza de la ley, como su propio nombre indica, pero también todos sus inconvenientes. No puede dudar entre salir a la calle o convocar una Marcha Verde. La doctrina jurídica es una y unívoca. Otra cosa es que no se muestre ante quien pretende pleitear.

Corea y el Día Mundial

Miércoles, 9 de Agosto, 2017

Kim

En el Día Mundial del Orgasmo Femenino, que se celebró ayer, Corea del Norte elevó varios puntos el tono de su lenguaje, tan agresivo como siempre, para amenazar esta vez con transformar las islas adyacentes y el propio Seúl en un mar de llamas, aunque no precisamente en un fuego de pasión.

También anuncia actuaciones estratégicas que incluyan misteriosas “medidas físicas que movilicen todo nuestro poder nacional”.

Esas palabras son inquietantes como para tomárselas a broma. El orgasmo femenino, también; de ahí el atrevimiento de unir ambos conceptos, que parecen opuestos en cualquier escala donde los sitúes. El amor y el odio; la paz y la guerra; el placer y el sufrimiento.

Corea del Norte es desde hace bastantes años una de las ronchas más incómodas del cuerpo mundial y cuando se mira hacia ella se hace con la misma actitud de un médico que examina una mancha en la piel de un paciente. Se le da importancia, no por lo que es, sino por lo que puede llegar a ser.

Entre tanto, Corea y su denostado dirigente viven de dar miedo. El país se arma para dar miedo y de sus portavoces emergen frases como las de ayer, que evidentemente causan pavor. Hoy la población de Seúl no puede celebrar ese Día Mundial con total tranquilidad y relajación, desde luego, aunque no parece probable que el orondo líder norcoreano haya tenido en cuenta la celebración internacional del orgasmo para lanzar su bravata, porque tampoco las sanciones que la motivan estaban pendientes de la fecha.

La amenaza y el climax son el alimento de Kim Jong-un. Zapatero reconoció que el suyo era una mezcla de tensión y crispación. Hay asesores que deberían estar prohibidos.

Kim Jong-un crispa todo lo que puede en unas relaciones con el resto del mundo cada vez más tensas, más alejadas del orgasmo y por lo tanto, de la necesaria relajación.

La conexión de la porra

Martes, 8 de Agosto, 2017

El lenguaje de Arran

Han descubierto que Arran, las juventudes hitlerianas de la CUP que atacan objetivos turísticos, se van a enfadar mucho si no hay referéndum el 1-O y planean armar una buena.

La verdad es que no era de esperar otra cosa en una banda que concibe su existencia en el uso de la violencia. Lo de sus objetivos es lo de menos, porque con ese planteamiento da igual lo que persigan porque no puede ser moralmente lícito.

Lo preocupante de las informaciones que en estos momentos se ofrecen sobre Arran es la magnitud de su implantación, es decir, su capacidad para causar males y destrucciones, no precisamente para ayudar al prójimo, salvo a los aborregados.

Y si esto es así solo se explica por el hecho de que uno, o varios partidos políticos establecidos anteriormente, vieron con buenos ojos que existiese una organización de tonton macoutes dispuestos a protagonizar actos de violencia simbólica, como quemar banderas o pintar dianas en las cabezas de políticos, sin reparar o reparando_, que el siguiente mojón en ese camino era el terrorismo de baja, mediana o gran intensidad.

Que ahora mismo ERC califique de anécdota los ataques al turismo ilustra con claridad su afán por estar a ambos lados de la violencia. Después irán a Madrid para presumir de demócratas.

Por desgracia, a lo largo de la historia española tienen mucho donde aprender sobre utilización de la violencia, sobre civiles armados y toda suerte de desmanes. Abundan más que las buenas prácticas. Quizá por eso les crezca ese odio rancio a la prosperidad, a la transición y en definitiva, a la convivencia democrática.

Ojalá no tengan que arrepentirse de todo ello quienes lo han permitido, fomentado y muy probablemente, subvencionado. Hoy ya se sabe que no se da un paso si no hay unos euros a ganar

España y otras naderías

Lunes, 7 de Agosto, 2017

Pedro Insua, en la estela de Gustavo Bueno

Si la frase “Hay que sentirse orgullosos de España” la dijese un general legionario, un ministro o Anson, el lector pensaría que carece del más mínimo interés porque entra dentro de la ideología que se le supone y cae de cajón.

Sin embargo, si el autor es un filósofo (Vigo 1973), que se define políticamente de izquierdas, ateo, republicano y feminista radical, el interés de la frase sube bastantes enteros y el deseo de conocer más a fondo a su autor, Pedro Insua, también.

El asunto no tiene mayor misterio. Insua es un hombre de intelecto bien preparado que no se deja arrastrar por la papilla intelectualoide con la que se conforman otros y bucea por sí mismo en aquellos aspectos donde se aplican falsos estereotipos, casi siempre de carácter antiespañol “porque sí”.

La mayor parte de sus artículos son de acceso inmediato, pero ocurre que le han hecho un entrevista y el hombre está estos días más publicitado.

Como no es el caso, ni el lugar, ni la capacidad, de reproducir aquí el pensamiento de Insua es recomendable visitarlo en sus fuentes originales para saborear sus opiniones sobre España, el PP, Podemos o la fragmentación catalana. “Apoyar el referéndum es de derechas”, dice por ejemplo sobre el 1-O.

No obstante, le tomamos prestado un párrafo donde el vigués condensa varios de los tópicos de la leyenda negra española, tan del gusto de nuestro amigo Luis Español Bouché. Dice así: “No entienden que España es una realidad histórica de la que no hay que renegar. Siempre dicen que si la Inquisición, que si la expulsión de los judíos _ cuando ambas cosas han pasado también en otras partes _, que si la destrucción del islam en España… ¡como si Al-Ándalus hubiese sido tan próspera como dicen! Es todo un invento. Incluso de la acción de España en América hay que estar orgulloso”.

¿Quién hace el CIS?

Domingo, 6 de Agosto, 2017

_¿A qué ministro valora peor?
_A López Robó

La sensación es de siempre, pero a la vista de los últimos resultados se acrecienta con ímpetu irrefrenable la percepción de que el CIS es el resultado de una suma de supuestos cocinados por un gabinete de sociólogos en una habitación mal iluminada.

A lo mejor incluso coincide con el exacto pensamiento de la población española, un extremo que nadie puede comprobar, como tampoco saber el número exacto de chinos que hay. De ser así, es chiripa, como si dices que hay 1.349.556.453 chinos y es verdad.

Los supuestos son los títulares de los periódicos. Por ejemplo, cada tres casos de corrupción que afecten a un partido, baja un punto; si hay trifulca de mandamases, baja medio; si se acaba la trifulca, sube dos… etc, etc.

El dato definitivo que me lleva a está conclusión es que en la presente oleada, los dos ministros peor valorados son los reprobados, Montoro y Catalá, que es como si lo dice un niño de 6 años. ¡Pero si el 97 por ciento de los españoles no conocemos ni cómo se llama el ministro de Justicia! ¿Cómo lo vamos a puntuar, ni bien, ni mal? A no ser, claro, que la pregunta se redacte así: ¿Cómo valora usted a Rafael Catalá, ese ministro cabrito que ha sido reprobado y que es más malo que la quina?

Entonces, sí.

Después está lo de la subida del PSOE, que es como de magia potagia. Gana Sánchez y sube la bolsa. ¿Por qué? ¿Por haber rebajado España a la categoría de nación de naciones? Son milagros del CIS Nuestro Señor.

La traca es la valoración de los líderes políticos, que resulta inversamente proporcional a los votos y apoyos que tienen. ¿Pero estamos gilipollas, o qué? Al más valorado, que es Garzón, no lo votan ni en su casa, y el que lo es menos, o sea, Rajoy, gana las elecciones.

Por eso hay que tomarse el CIS como los vaticinios de Aramís Fuster, que entretiene aunque no dé una.

La guirifobia

Sábado, 5 de Agosto, 2017

Turistas en pleno trabajo

Un buen día te levantas y después de desayunar te das cuenta de que eres turismofóbico, un sentimiento que guardabas agazapado al lado de otras manías de recambio para cuando estén de moda.

Eres como los islamistas radicales que se dedican a la caza de europeos en los museos de Túnez, o en las playas de Egipto. ¡Qué barbaridad! ¡Y tú sin saberlo! Bueno, algo se intuía, porque siempre has hecho chistes sobre las bandadas de pieles rojas en pantalón corto, camisa floreada y cámara al cuello, sustituida hoy por el palo para selfies.

Son los guiris que vienen a ver tu ciudad, comer lo típico y dormir en los hoteles que hayan contratado. Algunos incluso tienen la osadía de decir que así ahorran dinero, porque quedarse en sus ciudades les sale más caro.

No me extraña que te entre la guirifobia. Y ya no digamos si eres nacionalista radical vegano de la tierra madre que te parió. Entonces, además de la fobia, te sube la fiebre y solo se te aplaca arreándole con un bate de beisbol al primer autobús turístico que pilles cerca.

Con total exactitud no sabes por qué te pasan todas esas cosas, pero les das tu conformidad, como aquel hostelero que cerraba en agosto con el argumento de que “yo también tengo derecho a las vacaciones”. Por supuesto. Entonces él se convertía en guiri y se iba por el mundo adelante a fotografiar piedras.

Es de suponer que los afectados por este raro síndrome de la posverdad sufrirán espasmos convulsivos cuando lean que el Resurrection Fest lleva a Viveiro 86.500 personas; que el Arde Lucus atrae a varios miles más; que el Xacobeo, a millones, y que el turismo español se dispara hacia récords. Ahí sí que tienen que sufrir, con el agravante de que jamás podrán salir de su terruño, porque en cuanto cruzas de parroquia, prende la autoguirifobia, que ésa sí que duele.

La impostura total

Viernes, 4 de Agosto, 2017


Esto se llama pegarse tiros en el pie

Bajo la apariencia de una falsa confrontación ideológica enmarcada en la lucha de clases y una supuesta defensa del territorio y su patrimonio frente a una posible sobreexplotación turística, unos golfillos sin instrucción, pero de fiel obediencia al diseñador de la estrategia, han iniciado una serie ataques a hoteles, transportes y restaurantes de Cataluña, Valencia y Baleares, que son absolutamente inocentes de los hipotéticos cargos de los que se les acusa.

Tanta impostura está siendo recibida por las autoridades con una pasividad buenista, tiznada de fingida indignación y resignación complaciente, con lo cual todo resulta tan miserable e hipócrita que cuando el sector se pare a pensar quién defiende sus intereses, descubrirá que no solo no hay nadie en ese papel, sino que está pagando impuestos para subvencionar todo lo contrario.

La relación de los violentos con partidos que hoy ocupan importantes y decisivas cuotas de poder es una felonía que atenta contra los intereses generales, no solo de Barcelona, Baleares o de esos supuestos países catalanes.

Hay que decirlo sin tapujos. Son atentados contra el turismo español con él ánimo de perjudicar un sector triunfante que ayuda en gran medida a sobrellevar épocas de penuria.

El impacto de estas noticias en el extranjero afecta a la marca España, se produzcan donde se produzcan, y tienen un efecto demoledor si se mantienen.

Déjense de mandangas de sobreexploración y cursiladas semejantes. En caso de haberla, ni ellos son quienes para tomar medidas, ni ésas son las medidas, ni ésa es la respuesta que se espera del concejal de turno, que las califica de “acciones políticas” no compartidas.

La farsa que estos elementos ponen en pie es tan indignante, que no tendrían tiempo en su vida para pagarla, si es que alguien se lo exigiese, que no es el caso.